En un mundo donde el romanticismo promete que tendremos «todo» con una sola persona, la psicoterapeuta belga Esther Perel nos confronta con una verdad incómoda pero liberadora: mantener vivo el deseo en una relación de largo plazo no solo es uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo, sino que requiere una comprensión completamente diferente de lo que significa amar.
La Voz que Cambió el Discurso sobre las Relaciones
Esther Perel, nacida en Amberes en 1958, es una psicoterapeuta y escritora belga, notable por explorar la tensión entre la necesidad de seguridad (amor, pertenencia y cercanía) y la necesidad de libertad (deseo erótico, aventura y distancia) en las relaciones humanas. Fluente en nueve idiomas, ella helms a therapy practice in New York City y sirve como consultora organizacional para Fortune 500 companies around the world. Sus celebradas TED Talks han obtenido más de 40 millones de visualizaciones y sus libros bestseller, Mating in Captivity (Apareamiento en Cautiverio) y The State of Affairs (El Estado de los Asuntos), han sido traducidos a más de 25 idiomas.
Su biografía personal añade una dimensión profunda a su trabajo: criada en una comunidad de sobrevivientes del Holocausto en Bélgica, Perel observó desde temprana edad cómo el trauma puede matar la capacidad de experimentar placer, pero también cómo aquellos que «regresaron a la vida» entendieron lo erótico como un antídoto a la muerte.
La Crisis Silenciosa del Deseo Moderno
En su reveladora charla TED «El Secreto del Deseo en una Relación de Largo Plazo», Perel pone el dedo en la llaga de una paradoja que muchas parejas conocen pero pocas se atreven a nombrar: «¿Por qué el buen sexo se desvanece tan frecuentemente aun en parejas que continúan amándose uno al otro tanto como siempre?»
La respuesta, según Perel, radica en una contradicción fundamental de nuestro tiempo. Nunca antes en la historia de la humanidad hemos esperado tanto de una sola relación. Como ella explica: «Escogemos a una persona y básicamente le pedimos que nos dé lo que antes toda la aldea solía dar: Dame pertenencia, identidad, continuidad, pero dame trascendencia y misterio y asombro, todo en uno.»
Esta expectativa imposible crea lo que Perel identifica como una crisis del deseo que se extiende por todas partes donde el romanticismo ha entrado en las sociedades individualistas.
El Mapa del Deseo: Amor vs. Querer
Una de las revelaciones más poderosas de Perel emerge de una simple distinción lingüística que cambia todo: «Si hay un verbo, para mí, que acompañe a amor es ‘tener’. Y si hay un verbo que acompañe a deseo, es ‘querer’.»
Esta diferencia no es meramente semántica. En el amor, queremos cercanía, predictabilidad, seguridad. Queremos minimizar la distancia y neutralizar las tensiones. Pero el deseo opera en el territorio opuesto: necesita espacio, misterio, lo desconocido. Como Perel poéticamente lo expresa: «El fuego necesita aire. El deseo necesita espacio.»
La Investigación que Cambió Todo
Durante años, Perel llevó una pregunta crucial a más de 20 países: «¿Cuándo encuentra más atractiva a su pareja?» Las respuestas, consistentes a través de culturas y religiones, revelaron un patrón fascinante que desafía nuestras creencias sobre la intimidad.
Las tres respuestas más comunes fueron reveladoras:
- La magia de la distancia:«Es más deseable para mí cuando se va, cuando está lejos, cuando nos reunimos.» La ausencia y el anhelo, descubrió Perel, son componentes esenciales del deseo.
- El poder de la autonomía:«Me es más deseable cuando la veo en el estudio, cuando está en escena, cuando está en su elemento.» Vemos a nuestra pareja como más deseable cuando la observamos siendo radiante y autosuficiente, en su propio elemento.
- El elemento sorpresa:«Cuando estoy sorprendido, cuando reímos juntos… cuando hay novedad.» Pero aquí, Perel hace una aclaración crucial: la novedad no se trata de nuevas posiciones o técnicas, sino de «¿qué partes tuyas vas a mostrar?»
La Inteligencia Erótica: Más Allá del Instinto
Perel introduce un concepto revolucionario: la inteligencia erótica. «Los animales tienen sexo,» explica. «Somos los únicos que tienen una vida erótica, lo que significa que es sexualmente transformada por la imaginación humana.»
Esta inteligencia erótica incluye ingredientes que podemos cultivar: imaginación, alegría, novedad, curiosidad, misterio. Pero el agente central es la imaginación – nuestra capacidad única de «experimentar esa cosa potente llamada anticipación, que es el mortero del deseo.»
Las Parejas que Mantienen la Chispa
A través de su práctica terapéutica, Perel identificó las características de las parejas que logran mantener el deseo vivo:
Intimidad Sexual Diferenciada: Entienden que existe un espacio erótico que pertenece a cada uno de ellos individualmente.
Comprensión del Timing: Saben que «la estimulación erótica no es algo que haces cinco minutos antes de la cosa real. El juego erótico inicia al final del anterior orgasmo.»
Espacios de Transformación: Crean espacios donde pueden dejar de ser «el buen ciudadano que cuida de las cosas y es responsable. Responsabilidad y deseo solo pelean.»
Desmitificación de la Espontaneidad: Han entendido que «sexo comprometido es sexo premeditado. Es con voluntad. Es intencional.»
La Paradoja Central del Amor Moderno
Perel nos enfrenta con una verdad compleja: los ingredientes que nutren el amor – mutualismo, reciprocidad, protección, preocupación – son a veces los mismos que sofocan el deseo. El deseo viene acompañado de sentimientos que no siempre favorecen el amor: celos, posesividad, agresión, poder, dominación.
«La mayoría de nosotros no excitamos en la noche por las mismas cosas contra la que protestamos durante el día,» observa con su característica honestidad brutal. «La mente erótica no es muy políticamente correcta.»
Una Nueva Visión para el Amor Duradero
La propuesta de Perel no es pesimista, sino profundamente realista y, en última instancia, esperanzadora. Ella nos invita a reconocer que mantener el deseo en una relación comprometida requiere una dialéctica real: por un lado necesitamos seguridad para poder «irnos», y por otro, si no podemos irnos, no podemos culminar, no podemos tener placer.
Su metáfora del niño en el regazo es particularmente poderosa: solo cuando el niño sabe que habrá alguien cuando regrese, puede salir a explorar el mundo con confianza. En las relaciones adultas, esto se traduce en la capacidad de mantener tanto la conexión como la separación, la seguridad como la aventura.
El Antídoto Contra la Muerte del Deseo
Para Perel, inspirada por su crianza en una comunidad de sobrevivientes del Holocausto, lo erótico representa «un antídoto a la muerte» – una forma de mantenerse vivo, resonante, renovado. Cuando las parejas se quejan de falta de deseo, rara vez quieren simplemente más sexo; quieren reconectarse con «esa cualidad de estar vivo, de resonancia, de renovación, de vitalidad, de eros, de energía.»
La invitación final de Perel es tanto simple como revolucionaria: en lugar de preguntar «¿cómo mantengo el deseo vivo?», ella propone que preguntemos «¿cuándo me siento vivo?» y «¿cuándo me apago?» Las respuestas a estas preguntas, sugiere, pueden ser la clave para rescatar no solo nuestras vidas sexuales, sino nuestra vitalidad misma.
En un mundo que nos ha vendido el mito de que el amor verdadero debería ser suficiente, Esther Perel nos ofrece algo más valioso: la verdad sobre cómo crear relaciones que no solo perduren, sino que mantengan vivo aquello que nos hace sentir más profundamente humanos.
Basado en las ideas y enseñanzas de Esther Perel, especialmente su charla TED «El Secreto del Deseo en una Relación de Largo Plazo» y su trabajo pionero en terapia de parejas y sexualidad.
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