Las rupturas están lejos de ser divertidas y, si bien cada una de ellas es única, todas tienen una cosa en común: marcan un cambio en la vida de cualquier persona.
El cambio da miedo en el mejor de los casos, pero la emoción abrumadora que puedes sentir después de una ruptura es una de las más agudas. El mundo tal como lo conoces se verá diferente, y reajustarse a la vida como uno, no como dos, puede ser un desafío.
Es totalmente normal tener dificultades después de un cambio tan grande en tu vida. Pero saber que todo el mundo también experimenta angustia no lo hace menos difícil o doloroso.
Por eso hemos recopilado los mejores consejos sobre rupturas, desde consejos para protegerse de la depresión, el estrés crónico y la ansiedad, hasta explicaciones sobre las etapas del duelo que se experimentan después de una separación.
Consejos para superar el desamor
Cuando experimentamos una pérdida, muchos de nosotros pasamos por una montaña rusa de emociones. Esto puede afectar al bienestar físico y mental. Las relaciones estables y satisfactorias nos ayudan a sentiros más felices, por eso, cuando se atraviesa por una ruptura, es habitual tener una sensación parecida a la pena.
#1 Acepta que llorar es normal
Deberíamos aceptar que esta es una forma completamente normal de procesar cualquier pérdida, en lugar de negarlo. Hay quien puede preguntarse por qué, dado que no se trata de una muerte, debería estar de duelo, pero la aceptación es la forma más saludable de superar este período difícil.
No es de extrañar que te sientas deprimida cuando tu cerebro de repente se ve privado de los químicos que te hacen sentir bien y que tu relación provocó. Sin embargo, recuerda esto: si bien los finales pueden ser difíciles, a menudo son esenciales para tu salud y felicidad futuras.
#2 Controla lo controlable
Una ruptura no solo causa angustia emocional, sino también confusión en otras áreas de la vida. Por ejemplo, es posible que tengas que cambiar tu situación financiera o tu lugar de residencia, lo que puede generar más estrés.
Es importante recordar que no existe una manera correcta o incorrecta de sentirse al final de una relación, y cada persona lo vive a su manera, a su propio ritmo. Ante el caos, es importante concéntrate en controlar lo que puedes controlar como mecanismo de afrontamiento y construir a partir de ahí.
#3 Se consciente de que aunque la decisión fuera tuya también será difícil
Tienes permitido llorar, incluso si fuiste tú quien tomó la decisión de terminar la relación. Puedes lamentar la pérdida de lo que fue en los buenos tiempos, las esperanzas y los sueños, hasta el dolor por lo que debería o podría haber sido si las cosas hubieran sido diferentes.
De hecho, a veces puede resultar incluso más desafiante emocionalmente, ya que los sentimientos de alivio junto con el dolor de la pérdida son muy confusos.
#4 Comprende que es normal sentir dolor físico
Las personas suelen hablar de que la angustia se siente físicamente, y los estudios han descubierto que el dolor emocional se registra de la misma manera que el dolor físico.
Físicamente puedes experimentar dolores de cabeza o de estómago, agotamiento o molestias generales. Esto se debe a que cuando estás bajo estrés y presión, se producen hormonas, como el cortisol y la adrenalina, que pueden provocar pérdida de apetito, dificultades para dormir y ansiedad, lo que hace que nuestros músculos estén más tensos.
#5 Es importante sentir tus emociones para poder sanarlas
Cuando se trata de consejos sobre rupturas, las investigaciones han descubierto que suprimir las emociones no funciona; al contrario, ya que dichas emociones simplemente siguen regresando para atormentarte. Por otro lado, reevaluar los recuerdos de manera positiva puede ayudarte a seguir adelante.
Prueba a identificar y reconocer cada vez que reprimas un recuerdo doloroso. Luego, haz un esfuerzo activo para dejarlo atrás y convertirlo en parte de tu pasado, no de tu presente.
#6 No pierdas demasiado tiempo rumiando
Si bien necesitas sentir tus emociones para sanarlas, también es vital que lo equilibres sin perder tiempo rumiando (u obsesionándote) con eventos negativos del pasado. Mantente ocupada y distráete con actividades que te hagan sentir bien.
Lo apropiado es mirar al pasado para aprender lecciones para un futuro mejor (es vital para tu crecimiento personal y tu felicidad), pero evitando los pensamientos negativos repetitivos. Ya que la preocupación excesiva está relacionada tanto con la ansiedad como con la depresión.
#7 Practica mucho el autocuidado
Uno de los mejores consejos sobre rupturas que puedes escuchar es asegurarte de tratarte con amabilidad durante cualquier separación. Es clave cuidar mucho de una misma, y es especialmente importante para evitar posibles problemas de salud mental.
Prueba a reconectar con la naturaleza, mantener una buena higiene de sueño, quedar con los amigos, hacer deporte o mirar tu serie favorita. La estimulación de nuestro cerebro es vital para detener físicamente la liberación de las hormonas del estrés.
#8 Puede que tengas problemas con tu salud mental, y no pasa nada
Las rupturas de pueden ser un auténtico desafío, así que puedes experimentar algunos problemas de salud mental.
Podrías pasar por un estado depresivo. La ansiedad, la sensación de pérdida y el estrés, a menudo, también son inevitables. Puede que durante un tiempo te cueste encontrar interés o placer en las cosas, te resulte difícil concéntrate o tomar decisiones, o te sientas inquieta o agitada.
Si al cabo de unas semanas no hay mejoría es necesario pedir ayuda profesional. Ten en cuenta que estos síntomas pueden derivar en problemas físicos y mentales graves. Cuanto antes obtengas el apoyo que necesitas, más rápido podrás pasar página y mirar hacia el futuro.
#9 Habla, comparte y comunícate
No descartes lo que estás pasando. Es real, válido y afecta tu vida. Ya sea que recurras a tus amigos o busques apoyo profesional, debes saber que tu dolor es real. Nunca te sientas inadecuada por buscar ayuda para un corazón roto; no eres menos merecedora que cualquier otra persona que necesite apoyo para su salud mental.
Para algunas personas, plasmar sus emociones en papel puede ser un buen primer paso. Puede resultar catártico triturar o quemar el papel a posteriori, un acto deliberado de tomar el control y dejarlo ir.
#10 No te aísles socialmente
Esto puede ser muy tentador cuando estás sufriendo y quieres que te dejen en paz, pero solo terminará haciendo que te sientas peor.
Cuando estamos de duelo, tendemos a retraernos socialmente, pero los especialistas en duelo dicen que quienes mejor afrontan esta situación son las personas que pueden distraerse de lo sucedido, a través del contacto con familiares y amigos cercanos o a través del trabajo.
En pocas palabras: ser capaz de desapegarte del dolor puede ayudarte a no sentirte sola y, a su vez, ayudarte a seguir adelante.
#11 Identificar las cinco etapas del duelo
Esto podría ayudarle a procesar las fases por las que pasarás e identificarlas cuando llegues allí. Familiarizarse con las etapas del duelo puede ser un paso para reconocer y superar lo que le sucedió.
Las cinco etapas son negación, ira, negociación, depresión y finalmente aceptación. Han sido adoptadas universalmente como las etapas que se experimentan después de cualquier evento trágico o traumático, incluida la ruptura de una relación.
Estas cinco etapas no necesariamente ocurren una tras otra, cada persona experimenta su reacción de duelo de manera diferente. La clave es que eventualmente atravesarás el espectro de emociones y llegarás a la aceptación de lo que ha sucedido.
Como la gravedad y la duración de estas emociones pueden variar mucho de una persona a otra, y de una ruptura a otra, determinar si en cada etapa lo que sientes es normal o algo más grave puede ser difícil. Pero una cosa es segura: lo superarás.
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